Han pasado décadas desde la pelea con Spider Rico. Rocky en la cima de la carrera del boxeo, no tiene nada que probar; ha vencido a Apollo Creed, Tommy Gunn, Clubber Lang y a Ivan Drago y ahora como manager de su restaurante, lleva una vida de ciudadano común.
Philadelphia lo abraza como su hijo predilecto y él cuenta sus historias con gusto para el deleite de sus fans, que palabra a palabra lo llevan por el sendero de los recuerdos y, se eleva hacia la gloria de los otros tiempos.
Adrian ha fallecido, y la ausencia pesa en los hombros del campeón, y por el otro lado, su hijo siente su presencia como una carga difícil de superar. Rocky nos lleva de nuevo por peleas dentro y fuera del ring, donde podemos confirmar que, esto no se acaba, hasta que se acaba.
Mason Dixon, estrella en ascenso, busca a toda costa obtener la victoria contra Balboa para dejar de vivir a su sombra; y Rocky, con los estragos del tiempo y un cuerpo con numerosos años de diferencia de Mason, accede a una pelea para probarse una vez más como la leyenda que solo él puede sostener.
La fórmula de todas las películas de Rocky, incluyendo “Creed” (2015), es un tsunami de emociones y superación personal, donde Sylvester Stallone nos lleva por cada etapa importante de la vida y cómo aprender a superarla.
Escrita y dirigida por el mismo Sylvester Stallone y dirigida por Charles Winkler en el año 2006, recibimos una excelente entrega con la ayuda de nuevas tecnologías, donde los personajes clásicos y la innovación, nos entregan un filme sólido para los amantes del pugilismo.
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MBA egresado del EGADE Business School del ITESM y Lic. en Relaciones Internacionales por la UANL.
Actualmente labora como consultor ejecutivo y emprendedor.
Entre sus intereses preferidos están los videojuegos, relojes, instrumentos musicales y los autos.
