En un remoto y olvidado pueblo español, la aparición de una de las 30 monedas por las cuales Judas traicionó a Jesús, desencadenaran una serie de acontecimientos sobrenaturales y siniestros. A su vez el padre Vergara que vive en la iglesia local, un exconvicto y boxeador, tendrá que enfrentar a las fuerzas del mal que acechan el lugar, en compañía del intrépido alcalde y una vecina de profesión veterinaria.
Alex de la Iglesia, director español con una trayectoria de 30 años en su espalda, ofrece con esta “30 Monedas” (2020), un magnífico retorno a su enfoque sobre el género del terror, el mismo que plasmó en pantalla en su gran y recordada película “El Día De La Bestia” (1995). Satanismo, humor ácido, costumbrismo y hasta Folk Horror, son los pilares donde se apoya la trama, de un impacto visual importante y llena de referencias cinéfilas, que el espectador agradecerá. El guión corre por parte de Jorge Guerricaechevarría, junto con el director, en la colaboración número 17 entre ambos, y se nota la conexión, por lo fluido y entretenido del relato. Tanto la historia coral, cómo las relaciones entre los personajes y de los acontecimientos por vivir, no tienen desperdicio, el engranaje está perfectamente encajado.
Esta primera temporada, de 8 capítulos y cuyo título hace referencia a las 30 monedas por la cuáles Judas traicionó a Jesús, arranca con un 1er capítulo de magnitudes casi épicas. La puesta remite directamente al director John Carpenter y su siniestra y pesimista mirada sobre un grupo de personas tratando de enfrentar al Mal mismo, pero también a la modernidad de otro como Christopher Nolan, esto último desde lo conceptual. Un niño que nace del vientre de una vaca, la sorpresa y estupor del solitario pueblo ante el temible hecho, un hombre con un pasado muy duro (el padre Vergara) que busca refugio en la religión para sanar sus heridas y mucho más, serán la punta de ovillo que de a poco, en realidad capitulo a capitulo, se irá desmadejando.
Otras de las referencias más fuertes que el director nacido en la localidad de Bilbao decide aplicar es la del clásico del cine satanista “El Exorcista” (1973). Su impronta e iconografía estarán presentes a lo largo del relato y salvando las distancias, este padre Vergara comparte bastante con el otro padre Karras, el cura que saca el demonio del cuerpo de la niña Megan, en la enorme obra setentera de William Friedkin.
Alex de la Iglesia es más que un director de cine, un autor, que en todos y cada uno de sus trabajos pone su impronta y carácter. Un tipo de sentido del humor muy negro, brutalidad, buenas actuaciones y un gran impacto cinematográfico, son algunas de sus marcas. Yo me atrevo a catalogar a sus creaciones como de “Costumbrismo satánico”, si tal subgénero existe en realidad, esto es solo una apreciación personal y que destaca en su nueva serie “30 Monedas”.
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