Hansel y Gretel (en alemán, Hänsel und Gretel) es un cuento de hadas alemán recogido por los hermanos Grimm y publicado en 1812.
En esta versión la mayor novedad es que cambia el orden siendo Gretel (interpretada por Sophia Lillis) la protagonista y responsable de su hermano Hansel (Sammy Leakey) y no al revés como en el cuento.
Además de la protagonista, la antagonista, Holda, la bruja (Alice Krige) también es una mujer ya que la adaptación tiene un enfoque feminista no tratado hasta el momento.
Dirigida por Oz Perkins y con fotografía de Galo Olivares (ha trabajado en ROMA de Alfonso Cuarón) hace un uso muy hábil del encuadre y la paleta de color.
La película se suma a la tendencia dominante, desde hace unos años, del Orange & Blue (naranja y azul). Cuando juntamos dos colores que se encuentran en lados opuestos de la rueda de color, destacan y el color que mejor contrasta con el naranja es el azul, ya que el naranja es cálido y el azul es frío. Cómo están asociados con conceptos antagónicos la bruja está iluminada por luz azul y Gretel por luz naranja. La luz azul entra desde fuera y la luz interior es naranja.
En exteriores casi todo son blancos, azules, grises y algún color como el rojo, que está asociado a los protagonistas. El pañuelo de Gretel y…
… la gorra de Hansel.
Las composiciones simétricas son frecuentes, sobre todo en la primera mitad de la película.
Algo curioso es que, aunque el formato principal es 1.55:1. (Entre un formato 1.85:1 y un 4:3) el prólogo está rodado en formato panorámico 2.35:1
Una de las particularidades que más me llama la atención es la manera de encuadrar a los personajes, sobre todo a la protagonista, dejando más cantidad de “aire” por la parte superior y los lados, algo que ya hizo Carl Theodor Dreyer en su obra magna “La Pasión De Juana De Arco” (La Passion de Jeanne d’Arc) (1928)
En cuanto a los planos generales de exteriores, que reflejan la atmósfera de cuento de hadas, también he apreciado influencias del cine nórdico de la época muda como “Vampyr” (1932), también de Dreyer.
Y el virado a azul de la imagen, recurso utilizado en el cine mudo para indicar que la secuencia estaba sucediendo de noche. A la izquierda un fotograma de “Häxan” de Benjamin Christensen (1922)
Para generar esa atmosfera de cuento el director recurre a elementos como:
Lentes de gran angular que proporcionan un ángulo de visión muy amplio y más profundidad de campo.
Contrapicados, la cámara está situada por debajo de la mirada del personaje.
Interiores, en plano general, de unas medidas desproporcionadas que empequeñecen el elemento humano.
E imágenes asociadas a la iconografía del cuento de hadas clásico.
La niña sola en el bosque
La bruja con uñas como garras
La casa de la bruja.
La imagen reflejada en los espejos.
O la bruja devorada por las llamas.
Una película visualmente apabullante en la que el continente se impone al contenido, la forma al fondo.
Puedes comprar esta película en DVD o BLURAY. Te invitamos a leer nuestra otra opinión sobre Gretel & Hansel: ¿Es Galo Olivares el nuevo mejor cinefotógrafo mexicano?
Director y guionista de cine y televisión. Profesor de Historia del cine, de guion y de dirección en diferentes escuelas e instituciones. Como escritor ha publicado estudios, críticas y artículos relacionados con el séptimo arte. Ha publicado Te acordarás de mí, una novela negra ambientada en el Madrid de Primo de Rivera.