Un inocente juego entre dos niños acaba saliéndose de control en una mina al aire libre.
Nominado al Premio Oscar a Mejor Cortometraje De Ficción en 2019, “Fauve” del director Jeremy Comte debe ser una de las mejores obras en honrar el formato corto de historias en el cine. Una pieza magistral donde cada elemento y diálogo juega de forma natural hacia el tema del cortometraje.
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Situados en la Quebec rural en Canadá, un drama se desarrolla cuando uno de los dos jóvenes protagonistas queda atascado en las arenas movedizas de una mina vasta y desolada.
Un merecido premio del jurado en el Festival De Sundance durante su estreno en 2018 respalda la capacidad de su director por provocar emociones fuertes en su audiencia. Su yuxtaposición entre lo aparentemente mundano y lo aterrador te dejará una marca desde el primer visionado.
Escrita, dirigida y editada por Jeremy Comte, el autor comenta haberse inspirado en una pesadilla recurrente que solía tener de niño. Durante su vida adulta tuvo un flashback que le hizo revivir el sueño de su infancia, inspirándose a escribir su historia y luchar por su realización en formato de cine.
“Fauve” (Fiera, en español) tiene un balance entre lo natural y lo psicológico, la forma en que nos muestra nuestros rasgos más primitivos, nuestras emociones más fuertes en un mundo donde estamos solos contra la naturaleza, con toda su inmensidad y sus peligros.
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Los dos actores principales, Félix Grenier y Alexandre Perreault, son un par de niños que hacen de “Fauve” creíble hasta los huesos.
Su forma de mostrar ingenuidad y una crueldad juguetona infantil es muy acertada, como si el director ya tuviera a los dos en mente al momento de escribir su historia.
La cinematografía no se queda atrás. La belleza fotográfica a cargo del Director de Fotografía Olivier Gossot nos da un look natural con unas tomas a mano estilo “handheld” sutiles y unos paisajes bellos que se disuelven entre sí, distorsionando nuestra perspectiva sobre los espacios.
De momento creemos que una toma es un plano amplio cuando termina ser uno muy cercano y viceversa. Nos hará sentir atrapados en este mundo salvaje en donde solo parecieran habitar dos pequeñas almas.
Más que una crítica este artículo es una recomendación.
Los invito a ver más cortometrajes si acaso no acostumbran hacerlo. Son un formato de cine muy particular, con sus propias reglas, forma de realización y sus propias joyas escondidas. Son un formato importante ya que éstos no suelen tener un mercado estrictamente comercial, suelen ser más libres gracias a esto, y ayudan a formar nuevos realizadores.
Ver cortometrajes como “Fauve” (2018) nos inspiran y nos dan un vistazo temprano al trabajo de los realizadores que serán los futuros cineastas de mañana.
Puedes ver el cortometraje completo AQUÍ.
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Productor audiovisual & Cineasta regiomontano.
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