“Left Luggage” película de 1998 conocida en español como “Nunca Te Vayas Sin Decir Te Quiero” y dirigida por Jeroen Krabbé está basada en la novela “The Shovel And The Loom” de Carl Friedman.
Amberes, Bélgica 1972 Chaja, una joven judía, estudiante de filosofía, más bien impulsiva y revolucionaria, consigue por intermedio de un viejo amigo de la familia, el Sr. Apfelschnitt, un trabajo como niñera en casa de los Kalman, una familia judía ortodoxa .
Chaja quien no está de acuerdo con esta clase de creencias religiosas se ve en la disyuntiva de tomar o no ese trabajo pero finalmente acepta y allí conoce al pequeño Simcha quien logró cautivarla y sin lugar a dudas ese encuentro modificará la vida de ambos para siempre. Simcha es un niño de 4 años que no dice ni una sola palabra pero gracias al amor y a la dedicación de Chaja poco a poco comienza a hablar.
Por un lado está la historia de Chaja y su familia. Ella desde niña ha escuchado la historia de su padre, sobreviviente del holocausto, quien durante la guerra tuvo que abandonar su casa y enterró dos valijas con sus pertenencias más preciadas en algún lugar del cual no tiene ubicación exacta y pasa toda su vida buscándolas.
Chaja no comprende esta obsesión de su padre (quien en realidad busca su propia vida perdida en esos campos de concentración), ni tampoco nada relacionado con el judaísmo.
Por otro lado la historia de la familia Kalman con ideas muy conservadoras y estrictas sobre todo por parte del padre, Leibl, quien con todos mantiene una relación distante y muy severa. Y esto afecta a todos los integrantes de dicha familia pero sobre todo a Simcha quien a pesar de todo el esfuerzo que hace no logra ablandar el corazón de su padre.

Este film está excelentemente interpretado por la joven protagonista Laura Fraser (Chaja), el pequeño y amoroso Adam Monty (Simcha) y por maravillosos actores de la talla de Isabella Rossellini ( Señora Kalman), Maximilian Schell (padre de Chaja), Marianne Sägebrecht (madre de Chaja), Chaim Topol ( Sr Apfelschnitt), el mismísimo director de esta cinta Jeroen Krabbé quien interpreta al Sr. Kalman y David Bradley como el conserje del edificio donde vive la familia Kalman creando a la perfección un personaje siniestro.
Una bella y conmovedora película que recomiendo mucho, donde si bien las diversas creencias religiosas producen conflicto, distanciamiento, diferencias que parecerían ser irreconciliables, al mismo tiempo son motivo de aprendizaje y transformación. Personajes que a medida que se van cruzando entre sí y dejando de lado sus prejuicios logran comprender que cada uno tiene algo para compartir, enseñar y aceptar del otro.
La vida de cada uno de ellos ya no volverá a ser la misma después de haberse conocido. A Chaja el encuentro con ese niño y con esa familia con ideas tan lejanas a las suyas, le permite conocer otras formas de pensar, otras formas de ver el mundo y comenzará a comprender que para cada ser humano, más allá de su religión, más allá de cualquier filosofía de vida, lo importante es el respeto, la empatía y el amor por los otros.
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