“Venganza Silenciosa” es el retorno del autor hongkonés de cine de acción más aclamado de la historia al cine americano.
Después de más de 18 años, el director John Woo regresa con “Venganza Silenciosa” (Silent Night) de 2023, una historia de vendetta protagonizada por el infravalorado actor Joel Kinnaman que hemos podido ver anteriormente en producciones como “The Suicide Squad” (2021) interpretando a Rick Flagg. O como Alex Murphy en el remake de “Robocop” (2014).
La película inicia “in media res” con una persecución la cual concluye con el protagonista recibiendo un disparo en la garganta. Desde los primeros minutos el uso de diálogo es mínimo, y la conclusión de la escena nos deja en claro cuál es la dinámica que se intentará explorar en la película.
No Lo Abras (It Lives Inside, 2023) – Crítica
Un protagonista silente, con un rabioso deseo de obtener represalias después de una tragedia, arrasará con su vida y la de su familia.
Ahora, lo que hace “Venganza Silenciosa” a diferencia de otras cintas dónde el protagonista es silente, es que aunque si hay personajes que pueden hablar, la película toma la particular decisión de presentarnos lo mínimo a través de conversaciones. Optando por expresiones, ambientación, tono, e imágenes para transmitir sus emociones y conectarnos con su historia.
La razón principal por la cual esperaba ansiosamente “Venganza Silenciosa” es porque John Woo es uno de mis directores de cine favoritos.
Con un repertorio de films como “Un Mejor Mañana” (1986), “El Asesino” (1989), “Duro De Vencer” (1992) “Operación Cacería” (1993) y “Contracara” (1997). Lo coloco entre los directores de acción más innovadores, únicos, y con un estilo tan poderoso lleno de melodrama, sentimentalismo, y muchas balas.
John Woo es el progenitor del subgénero conocido como “Gun-Fu”. Películas que toman el concepto de los ‘shoot ’em ups’ tan popularizado por Sam Peckinpah en “La Pandilla Salvaje” (1969) y eventualmente llevado al límite con películas como “Comando” y “Rambo: Primera Sangre Parte II” ambas estrenadas en 1985.
Pero lo que hace Woo es inyectar este estilo con una gracia y acrobacias espectaculares, creando en pantalla una especie de ballet de balas que deja estupefacto a su audiencia por el ingenio que cuenta la coreografía de estas escenas, y la destreza con la que son ejecutadas.
Toro Salvaje – Apreciación Visual
En “Venganza Silenciosa” me complace decir que las imágenes que Woo crea aún cuentan con el poder que solo él puede infundirles.
Un momento en donde una lágrima transiciona a una bala, y otra secuencia en donde el personaje principal utiliza un péndulo para representar la ansiedad y su sed de venganza, el impacto de las bolas de metal que reflejan al personaje principal contando los segundos para actuar sobre su ajuste de cuentas.
Hay múltiples puntos en la cinta donde el talento en dirección de John Woo es el elemento a destacar. Aunque hay que recalcar que esta versión de Woo es una que se ha dejado llevar por varias de las tendencias actuales del cine de acción, o sea que opta por imitar películas que inclusive lo imitaban a él.
Por ejemplo, mucho del ADN proviene de la saga de “John Wick”. Al punto de que Woo decidió trabajar con gente como Jeremy Marinas, persona encargada de la coordinación de peleas en “John Wick 4” (2023). El final de esta cinta es una avalancha de peleas, disparos, y choques que recuerdan más el trabajo de Chad Stahelski que el del mismo Woo. Una copia de una copia, una sombra.
Si pudiera describir lo que sucede aquí en términos más pop, entonces diría que si el Woo de los 80s/90s es la Coca Cola original, entonces el Woo de “Venganza Silenciosa” (2023) es Pepsi de dieta. Sigue siendo bueno, pero es diferente a lo que nos tenía acostumbrado en su época de oro.
Nobody: Un Hombre Común Que Sabe Golpear – Opinión
Es posible que algunas personas salgan de “Venganza Silenciosa” (Silent Night) tachando a la película de racista. El antagonista es un grupo criminal compuesto de matones mexicanos genéricos.
Aunque definitivamente yo no diría que esta película sea discriminatoria, creo que Woo y el guionista Robert Archer Lynn no se hacen muchos favores al presentarnos con villanos con tan poco trasfondo. Y con una visión muy “blanco y negro” en cuanto las acciones de los personajes. Lejos queda el abordaje dialéctico de una película como “El Asesino” (1989) dónde explora realmente el significado de la justicia y nos presenta un protagonista que aunque está del otro lado de la ley, cuenta con características bondadosas. Y un antagonista que aunque busca la rectitud es víctima de su comportamiento vicioso y violento.
Creo que temáticamente lo que más admiraba de la era dorada de Woo es las ganas de presentar ambos lados, no como opuestos pero como análogos. En “Venganza Silenciosa” el villano es el villano, y el bueno es el bueno. No hay espacio para matices en esta producción y en lo personal encuentro eso bastante decepcionante. Algo que sí se tiene que mencionar es que mucho de la película fue filmada en Metepec, Estado de México. Brindando empleos para la industria local y creo que eso es suficiente para despejar cualquier acusación de racismo para la cinta.
Al final la premisa y dinámica es estirada hasta su máxima expresión y creo que termina siendo perjudicial para la cinta. En momentos se siente hasta soso y termina agotando su combustible, aunque haya iniciado como un experimento valiente e interesante.
Definitivamente, es una propuesta admirable. Si eres fan del cine de acción, el regreso de John Woo es un evento importante, así que los invito a verla y sacar sus propias conclusiones.
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